En los últimos días del mes de octubre convocamos unas jornadas en Batán.

Empezaremos por lo importante: agradeceros, inmensamente, vuestra asistencia, apoyo y colaboración.

Habrá  muchas más.

Empezamos el día recordando los múltiples motivos por los que llegamos y seguimos en Batán, el trabajo que se ha llevado a cabo en estos ocho meses, las diferentes líneas de trabajo, las personas que forman parte del proyecto, los apoyos, las dificultades y todo lo que está por venir.

Se constituyeron tres mesas de trabajo:

-Agroecología  y la necesidad de hacer del espacio un lugar más sostenible:

-Creación de un grupo de trabajo para la coordinación de diferentes colectivos y personas interesadas en cultivar y colaborar en la finca, a través del intercambio de conocimientos y experiencias.
-Necesidad de hacer de la finca, un espacio sostenible a través de talleres de bioconstrucción.

-Cesión del espacio y asesoramiento legal:

  .Presentación del proyecto formal

  .Petición de cesión del espacio

-Alternativas a la intervención en drogodependencias:

 .Batán ya es una alternativa real

 .Importancia de recuperar espacios y derechos

 .Seguir denunciando la situación

.Visibilización

.Iniciativas particulares

.Volver a resituar las drogodependencias como una problemática de carácter social

 

Comimos paella a cargo de San Carlos Borromeo. Escuchamos historias gracias a Paqui Luna. Xulián Freire nos regaló música a ritmo de blues. Irene y Nicolás se encargaron del taller de teatro social. Y Mariano Castaño recitaba poemas de su libro, recién editado, mientras prendía la leña en las chimeneas.

La asamblea al atardecer nos recordó que Batán es necesario.

Que ya es la casa de varias personas, el huerto de otras tantas, un lugar donde desarrollar talleres, campamentos,  donde olvidar que uno es solo aquello que le contaron y poder descubrir aquello que aún no sabe,  donde crear, aprender, estar junt@s, descansar, compartir…

Os esperamos, siempre.